El chicle (del náhuatl tzictli), se obtiene de la savia del árbol Manilkara zapota, que crece
en países como México, América central o América del
sur. Debido a su sabor dulce y aromático, numerosos pueblos amerindios
utilizaban la goma para mascar.
¡Hasta 40 metros de largo! imagen: flickr.com |
El Manilkara zapota no se explota hasta cumplir los 25 años. Como escarifica los cortes antiguos, sólo puede drenarse cada árbol una vez cada dos o tres años, así que las posibilidades de explotación no son indefinidas.
Para fabricar chicle se emplean ahora otras especies parecidas (la balatá, M. bidentata, y la Mimusops globosa). Hoy en día se usan preferentemente productos a base de petróleo en lugar de resinas naturales.
Trabajando con la savia del árbol. imagen: mngadaya.blogspot.com |
Se puede decir que fue Thomas Adams quién empezó a comercializar la goma de mascar. Sin embargo, comenzó a utilizar el producto como sustituto del caucho para fabricar ruedas, juguetes, botas de lluvia… Pronto, descubriría que el material era demasiado blando para ello. La afición de un conocido suyo por mascar la goma le dio la idea de comercializarlo, lanzándolo en un primer momento como alternativa a la parafina.
Adams patentó la goma de mascar en 1869 y en 1871 comenzó a producirla en masa bajo la marca ‘Adams New York Chewing Gum’. En 1875 tuvo la idea de mezclar el producto con jarabe de arce y regaliz para darle sabor.
¿Cómo se hace el chicle? En este vídeo afirman que a la base de goma se le añade plástico y caucho, además de dextrosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Déjanos tu comentario, te lo agradecemos :)